Los neurocientíficos sospechan que los virus y las bacterias están
detrás de muchos trastornos psíquicos. En algunos casos, como
ocurre con la esquizofrenia, podrían desencadenar el mal antes del nacimiento. "Si hay problemas infecciosos
durante la gestación, las toxinas quizá afecten al desarrollo del cerebro",
explica Francesc Artigas, jefe del Departamento de Neuroquímica y
Neurofarmacología del Instituto de Investigaciones Biomédicas de Barcelona.
Lo que
subraya Artigas fue demostrado con ratas por otro científico español, José
Borrell, del Instituto Cajal (INRC), en Madrid, en un estudio publicado hace ya
una década. Cuando les administraba una endotoxina de origen bacteriano, su
respuesta inmunológica desencadenaba alteraciones en los mecanismos de
procesamiento de la información sensorial semejantes a las descritas en el
citado trastorno mental.
Artigas señala otro dato revelador: "En situaciones de infección antes o durante el parto, el riesgo de que el bebé padezca esquizofrenia, que normalmente afecta al 1 % de la población, se multiplica por cinco o por seis". Hace poco, un pequeño trabajo demostraba que las personas nacidas en invierno tenían más probabilidades de desarrollarla en la edad adulta. Aunque el motivo principal aducido por los autores era la falta de vitamina D, apuntaban también a la influencia de un episodio vírico durante el segundo trimestre del embarazo.
Artigas señala otro dato revelador: "En situaciones de infección antes o durante el parto, el riesgo de que el bebé padezca esquizofrenia, que normalmente afecta al 1 % de la población, se multiplica por cinco o por seis". Hace poco, un pequeño trabajo demostraba que las personas nacidas en invierno tenían más probabilidades de desarrollarla en la edad adulta. Aunque el motivo principal aducido por los autores era la falta de vitamina D, apuntaban también a la influencia de un episodio vírico durante el segundo trimestre del embarazo.
BACTERIAS
1. Alzhéimer
La huella del crimen. Gracias a la magnetoencefalografía los
neurocientíficos han descubierto que la bacteria Borrelia Burgdorferi está
presente en un 25,3% de las persona con esta demencia incurable.
Este microorganismo es transmitido por las garrapatas.
2. Autismo:
En 1998 un estudio vinculó este mal en con la vacuna triple
vírica, aunque luego se demostró que no era cierto.
3. Esquizofrenia
En 2011 un estudio aseguraba que los esquizofrénicos tendría
más anticuerpos para luchar contra el parásito Toxoplasma gondii y ha alertado
sobre sus efectos en la salud mental
4. Depresión
La bacteria E.coli pertuba la flora intestina, esto influye
en los niveles de estrés y puede agravar una depresión
5. Parkinson
Algunos expertos aseguran que la bacteria Clostridium
dificile podría contribuir a que se desarrolle esta enfermedad.
6. Hemorragia cerebral.
En 2011 médicos japoneses demostraron que el 27% de los
afectados por derrame presentaban también una infección bucal causada por
Streptococcus mutans.
Cecilia Pérez Lobo 4ºB